Manténgalo limpio. Aspire el polvo a menudo para evitar que los agentes contaminantes se acumulen.
Evite colocar sus muebles en luz del sol directa. La exposición directa y prolongada al sol causará que los colores varíen.
No deje los periódicos sobre los muebles de cuero. La tinta en el papel prensa se puede absorber en el cuero.
Evite el frotamiento duro o excesivo y permita siempre que el cuero húmedo se ventile naturalmente, nunca utilice secadores de pelo ni otras aplicaciones para secar el cuero.
Mantenga el cuero humectado. Puede utilizar una crema incolora protectora para evitar su deterioro.
En caso de derramamientos, absorber el exceso de líquido sin frotar. Debe ser necesario, utilizar agua limpia, tibia y enjuagar suavemente el líquido derramado. Secar con una toalla limpia.
No seque las zonas húmedas con secadores de cabello.
Si las manchas son de manteca aceite o grasa, retírelas con un paño limpio o seco. Luego déjelo así, ya que la mancha se disipa en el cuero rápidamente. No aplique agua para limpiar este tipo
de manchas.
Nunca utilice jabones o limpiadores abrasivos, aceites lustra muebles, barnices, ni agua de amoníaco.
Recomendamos la utilización de cremas para cueros: otorgan las sustancias nutritivas para que mantenga su óptimo aspecto y suavidad, como así tambien impermeabilidad al agua y a la suciedad.